Técnicas de diagnóstico de la onicomicosis

Puntos clave La confirmación del diagnóstico de la onicomicosis con técnicas de laboratorio que identifiquen el hongo causante de la infección es fundamental para establecer un tratamiento efectivo1,3,7,8,10. El examen microscópico directo es una técnica rápida y sencilla, pero no permite identificar la especie del hongo4,5. La reacción en cadena de la polimerasa ha demostrado un rendimiento superior al de las técnicas tradicionales6. Los nuevos métodos de diagnóstico ofrecen resultados prometedores, pero, en su mayoría, no son accesibles en la práctica diaria7. La aparición de nuevas técnicas de diagnóstico no supone la eliminación de las convencionales, sino un punto de apoyo para mejorar sus resultados6. La asociación de varias técnicas de diagnóstico mejora la precisión de la identificación el hongo causante de la infección ungueal10.

Introducción

El diagnóstico de la onicomicosis comienza con la sospecha clínica de una infección micótica ungueal seguida de una anamnesis detallada. Sin embargo, la presencia de signos y síntomas compatibles con la enfermedad no es suficiente para realizar el diagnóstico adecuado^1,2.

La presentación clínica de la onicomicosis es heterogénea y los hongos causantes pueden ser diversos. Por ello, es necesario confirmar el diagnóstico mediante pruebas diagnósticas complementarias a fin de maximizar el éxito terapéutico^1-3.

Técnicas de diagnóstico convencionales de la onicomicosis

Son herramientas útiles, muy usadas en la práctica clínica, que han demostrado su efectividad en la confirmación del diagnóstico de la onicomicosis^1,2,8.

Examen directo

Es un procedimiento sencillo en el que se mira al microscopio óptico la muestra de la uña (figura 1) afectada para detectar el hongo causante de la onicomicosis. Es una técnica de bajo coste, rápida, accesible y con una alta sensibilidad, aunque no permite distinguir entre especies o la viabilidad del hongo^4,5.

Tradicionalmente, la prueba se realiza con hidróxido de potasio, pero el uso de blanqueadores fluorescentes, como el blanco de calcoflúor, facilita la identificación^1,6.

Figura 1. Toma de muestra de uña

Cultivo fúngico

Permite identificar los caracteres microscópicos y macroscópicos del hongo⁶. Se utilizan diferentes medios de cultivo para asegurar un crecimiento selectivo, pero el proceso dura semanas^6,7.

Presenta una sensibilidad inferior a la que proporciona el examen directo y una elevada especificidad, asociada a una alta tasa de falsos negativos^7,8.

Examen histopatológico

El análisis histopatológico determina las características microscópicas del hongo utilizando el método de tinción con ácido peryódico de Schiff, entre otros^1,2. Es la técnica de diagnóstico convencional más sensible, pero es una prueba costosa y no puede determinar la especie del hongo ni su viabilidad^2,7,8.

Las técnicas de diagnóstico convencionales son herramientas de diagnóstico efectivas, pero presentan algunos inconvenientes, como el requerimiento de un tiempo excesivo o la baja especifidad⁶.

Nuevas técnicas de diagnóstico de la onicomicosis

Métodos visuales no invasivos

Onicoscopia. Es una técnica que puede ayudar a identificar visualmente la onicomicosis para proceder a una evaluación micológica o realizar un seguimiento de la evaluación del paciente^2,7. Se debe combinar con otro método de diagnóstico para confirmar la presencia del hongo e identificarlo⁷.

Tomografía de coherencia óptica. Ofrece un estudio de imágenes en tiempo real que facilita la identificación de alteraciones en la lámina, el lecho y la matriz ungueal que pueden correlacionarse con la onicomicosis. Es una prueba rápida de gran utilidad en la práctica clínica, pero aún debe consolidarse⁷.

Microscopía confocal de reflectancia. Proporciona imágenes en tiempo real gracias al uso de un sistema de láser. Tiene una sensibilidad y especificidad variables y una profundidad de penetración limitada^2,7. Se necesitan más estudios clínicos que avalen su implantación en el diagnóstico clínico de la onicomicosis².

Fluorescencia ultravioleta. Detecta las diferencias entre la señal ultravioleta de una uña sana y otra infectada. Muestra los resultados de manera rápida, pero aún no se ha determinado su uso específico en la onicomicosis⁷.

Métodos de identificación microbiológica

Ensayo de flujo lateral. Se ha desarrollado una tira reactiva para dermatofitos que, a través de la inmunocromatografía, permite detectar la reacción de anticuerpos monoclonales con los polisacáridos presentes en la pared celular del dermatofito^3,9. Es una prueba rápida, sencilla y con una elevada sensibilidad⁹. Es útil para identificar una infección fúngica, pero necesita combinarse con otra técnica para seleccionar el tratamiento óptimo⁷.

Reacción en cadena de la polimerasa (PCR). Es una técnica rápida y económica utilizada para crear copias del ADN fúngico para identificar el hongo causante de la onicomicosis^7,8. La PCR en tiempo real es efectiva para diagnosticar la onicomicosis, especialmente por dermatofitos^6,8. Por el contrario, no se recomienda la PCR anidada para el diagnóstico⁶.

La evaluación de la actividad de transcripción del gen que codifica la actina del hongo es un indicador potencial de su viabilidad y de la eficacia del tratamiento⁶.

El rendimiento que proporciona esta prueba es superior al de los métodos convencionales. Sin embargo, no debe reemplazar a los métodos anteriores, sino combinarse con ellos para ofrecer mejores resultados⁶.

Citometría de flujo. Es una tecnología que identifica diferentes poblaciones celulares, separándolas según el tamaño, la granulosidad y la presencia de marcadores de ADN y proteínas^2,3. Puede identificar al hongo causante de la onicomicosis, pero es una técnica costosa y difícil de manejar³.

Espectrometría de masas MALDI-TOF. Es un método de identificación basado en la creación de un espectro a partir del perfil de proteínas del organismo, que se compara con los datos recopilados de organismos conocidos. Es una herramienta eficaz para identificar dermatofitos^3,7.

Presenta buena sensibilidad, pero, debido a la necesidad de un equipo especializado, no es muy accesible⁷.

Espectroscopía Raman. Es una técnica espectroscópica que proporciona información química mediante la interacción de la luz con los enlaces químicos de una sustancia. Es una herramienta con alto potencial para identificar el hongo causante de la onicomicosis, pero, al igual que la espectroscopía de masas MALDI-TOF, necesita un equipo especializado que no es accesible en la práctica diaria⁷.

Inteligencia artificial

Es una tecnología que combina un gran número de conjuntos de datos estandarizados y algoritmos para detectar coincidencias con la información de la patología proporcionada^2,10. El tipo más preciso de inteligencia artificial en el diagnóstico de la onicomicosis es la red neuronal convolucional, que utiliza un gran repositorio de imágenes clínicas para identificar las lesiones ungueales¹⁰.

Presenta múltiples ventajas, como la elevada sensibilidad, la alta precisión en el cribado y la rapidez, que ponen de manifiesto su utilidad como herramienta de apoyo en el diagnóstico de la onicomicosis¹⁰. También, presenta un alto potencial para que los pacientes puedan evaluar sus propias uñas (figura 2)². No obstante, aún debe implantarse en la práctica clínica y fomentarse su aprendizaje^2,10.

La inteligencia artificial puede ayudar a diagnosticar la onicomicosis generando algoritmos de predicción de la enfermedad a partir del uso de información clínica¹⁰.

Figura 2. Aplicación móvil de salud para la autoevaluación de la lesión ungueal

Combinación de técnicas de diagnóstico de la onicomicosis

Combinar diferentes técnicas de diagnóstico es una estrategia eficaz para conseguir mejores resultados^10,11.

El cultivo fúngico debe asociarse con otra técnica, como el examen directo o el análisis histológico, para evitar falsos negativos⁶. La combinación más utilizada es con el examen directo con hidróxido de potasio¹¹. También, se puede combinar el examen directo con hidróxido de potasio con el análisis histológico para identificar las hifas fúngicas¹¹.

La combinación de las técnicas de diagnóstico más novedosas con los métodos convencionales supone una mejora en el diagnóstico y garantiza mayor precisión en el resultado⁶.

Conclusiones

El diagnóstico de la onicomicosis mediante los métodos tradicionales ofrece buenos resultados, aunque presenta ciertas limitaciones. La aplicación de nuevas pruebas químicas, de diagnóstico molecular o de inteligencia artificial puede ayudar a un diagnóstico más preciso de la onicomicosis y a establecer el tratamiento óptimo.

La determinación del hongo causante de la enfermedad es un proceso complejo. Por ello, tener en cuenta las técnicas de diagnóstico existentes y combinar varias puede mejorar el diagnóstico y ayudar a alcanzar el éxito terapéutico.

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