RESUMEN
La nueva guía de la Sociedad Europea de Cardiología (ESC) sobre la insuficiencia cardíaca (IC) se publicará en 2021. En lo que llega ese momento, la necesidad de recoger la nueva información científica se ha traducido en este documento, que recoge las recomendaciones consensuadas por los expertos reunidos en Frankfurt en enero de 2019.
En concreto, se analizan varios tratamientos farmacológicos (entre ellos, varios tratamientos no incluidos en la guía de 2016 o bien poco estudiados todavía) y dispositivos médicos, así como otros aspectos relacionados con el abordaje de la enfermedad y con los hábitos de vida. Destaca que por primera vez se incluye a los pacientes con insuficiencia cardíaca con fracción de eyección de rango medio (IC‑FEm) en su propia categoría. En esta revisión nos centraremos en los aspectos relacionados con el tratamiento farmacológico.
COMENTARIO
Respecto a los fármacos utilizados para tratar la IC con fracción de eyección reducida (IC-FEr), el comité concluye lo siguiente:
- Inhibidores del cotransportador 2 de sodio y glucosa (ISGLT-2). La canagliflozina y la dapagliflozina se suman a la empagliflozina como hipoglucemiantes que deberían tenerse en cuenta en los pacientes con diabetes de tipo 2 y riesgo cardiovascular elevado o enfermedad cardiovascular establecida, con el fin de prevenir o retrasar la aparición de la IC y las hospitalizaciones por su causa. Con los conocimientos actuales, no se pueden establecer recomendaciones sobre el uso de ISGLT-2 en los pacientes con IC.
- Canakinumab. No existen suficientes pruebas científicas que permitan recomendarlo en los pacientes con IC.
- Sacubitrilo-valsartán. La guía de 2016 lo recomienda en sustitución del inhibidor de la enzima convertidora de la angiotensina (IECA) o del antagonista de los receptores de la angiotensina II (ARA-II) para reducir el riesgo de hospitalización y muerte por IC en pacientes con IC-FEr que permanecen sintomáticos a pesar del tratamiento óptimo con un IECA, un bloqueante β y un ARM.
El comité de expertos de 2019 refiere que, en los pacientes hospitalizados por IC, el tratamiento podría iniciarse directamente con el sacubitrilo-valsartán, en vez de con el IECA, para reducir las complicaciones a corto plazo y para simplificar el tratamiento (no habría así necesidad de ajustar el IECA y después cambiarlo a sacubitrilo/valsartán). Debido a que estos pacientes ya tienen un riesgo alto de complicaciones, no se necesita comprobar la concentración plasmática de péptidos natriuréticos. Por el contrario, en los pacientes ambulatorios sí es preciso determinar la elevación de los péptidos natriuréticos, indicativa del elevado riesgo y de la necesidad de un tratamiento más efectivo.
- Quelantes del potasio. Los expertos consideran que el patiromer y el ZS-9 podrían usarse en algunos pacientes con IC, con el fin de permitir el ajuste ascendente de la dosis de ARM evitando la hiperpotasemia.
En cuanto a la IC-FEm, el comité aclara que no hay estudios prospectivos exclusivos con este tipo de pacientes, por lo que sus recomendaciones se basan en análisis a posteriori de estudios que incluían también otros tipos de pacientes. Dichas recomendaciones son las siguientes:
- Bloqueantes β. Podría administrarse un bloqueante β a los pacientes ambulatorios con IC-FEm sintomática, con ritmo sinusal, para reducir la muerte por causas cardiovasculares y por cualquier causa.
- Candesartán. Podría administrarse candesartán a los pacientes ambulatorios con IC-FEm sintomática, con el objetivo de disminuir el riesgo de hospitalización por IC y la muerte por causas cardiovasculares.
Espironolactona. Podría darse a los pacientes ambulatorios con IC-FEm sintomática que no tuvieran contraindicaciones, para disminuir el riesgo de hospitalización por IC y la muerte por causas cardiovasculares.